FUENTE: rtve.es
Gravar o no el patrimonio de las rentas altas. Los partidos han vuelto a poner el foco sobre esta disyuntiva después de la decisión del presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, de suprimir el impuesto de patrimonio en su territorio. Se trata de un tributo cedido a las comunidades autónomas, que tienen en su mano el poder de subirlo, bajarlo o eliminarlo, por lo que existen grandes diferencias entre regiones.
Estas rebajas son claros incentivos para que los titulares de grandes rentas y patrimonios de toda España trasladen su domicilio fiscal a estos territorios, lo que les aporta grandes beneficios pero a su vez perjudica a sus comunidades de origen porque les resta ingresos.
Esto es lo que denuncian algunas formaciones como Unidas Podemos, ERC o Bildu, que han acusado a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y ahora también a Juanma Moreno de hacer “dumping fiscal» (competencia desleal) por eliminar este tributo. También desde el Gobierno han criticado que estas medidas «eliminan impuestos a los privilegiados» y «recursos para políticas públicas». He aquí las principales claves del impuesto de patrimonio:
¿Qué es el impuesto de patrimonio?
Es un tributo estatal que grava el patrimonio neto de las personas físicas, es decir, el conjunto de bienes y derechos de contenido económico de los que es titular. Fue suprimido en 2008 pero, con la crisis económica, se decidió restablecer con carácter temporal. No fue así finalmente, ya que en 2021 se le otorgó carácter indefinido.
¿Quién lo gestiona?
Pese a ser un impuesto estatal, su rendimiento está cedido en su totalidad a las comunidades autónomas. Como consecuencia de esta cesión, los gobiernos autonómicos pueden asumir competencias normativas sobre el mínimo exento, tipo de gravamen y deducciones y bonificaciones de la cuota. Los motivos van desde lo ideológico hasta la necesidad de conseguir más ingresos.
¿A cuántas personas afecta?
En 2020, alrededor de 200.000 contribuyentes presentaron la declaración de dicho impuesto, con un patrimonio medio declarado de 3,5 millones de euros, según la Agencia Tributaria.
Según la ley estatal, son personas con bienes superiores a 700.000 euros, al que se suma una exención de 300.000 euros para la vivienda habitual. No obstante, este umbral es más bajo en algunas comunidades como Aragón (400.000 euros) y Cataluña, Extremadura y Comunidad Valenciana (500.000 euros).
¿Qué bienes se incluyen en la declaración?
Bienes inmuebles, depósitos, acciones, seguros de vida, joyas, vehículos de más de 125 cc, embarcaciones y aeronaves, así como objetos de arte y antigüedades.
¿En qué comunidades se aplica?
Como decíamos, el impuesto existe en todas las comunidades, si bien algunas aplican bonificaciones que llegan hasta el 100 % en el caso de la Comunidad de Madrid y, a partir de ahora, también de Andalucía. Otras regiones como Galicia tienen regulada una bonificación del 25 % o incentivos para discapacitados o patrimonios especialmente protegidos.
¿Cuánto se recauda?
De acuerdo con los últimos datos disponibles por el Ministerio de Hacienda, correspondientes a 2019, mediante este tributo se recaudaron 1.355 millones de euros. Esto es, un 0,9 % de lo que recaudan las comunidades autónomas.
Se trata de una cifra muy inferior a la de hace una década, cuando se llegaron a recaudar más de 2.360 millones de euros, lo que se explica por los cambios normativos que empezaron a aplicarse en 2012, como el mínimo exento y la exención de la vivienda habitual, así como por las bonificaciones de algunos gobiernos autonómicos.
¿Cuál es la comunidad que más recauda? ¿Y la que menos?
Debido a la bonificación total, Madrid es la comunidad que menos recauda por este impuesto. Enfrente se sitúa Cataluña, que es la región con mayor recaudación: 554.908 millones de euros en 2019. Le siguen, aunque mucho más lejos, el País Vasco con 167.643 millones y la Comunidad Valenciana con 152.772 millones de euros.
¿Y dónde más y menos se paga?
De la misma forma, Madrid es la región española donde menos se pagan impuestos por Patrimonio, ya que el gobierno autonómico lo bonifica al 100 %. Un contribuyente con una fortuna de 800.000 euros pagará 1.164 euros si es aragonés, 770 euros si es catalán y 0 euros si es madrileño.
Para altos patrimonios, Extremadura es la región donde más impuestos se pagan: si en lugar de 800.000 euros tiene cuatro millones de euros, la cuota asciende hasta los 59.920 euros. En Madrid, continúa siendo 0 euros, mientras que en Cataluña este contribuyente debería desembolsar 41.944 euros.
¿Es obligatorio presentarlo?
Están obligados a presentar declaración del impuesto de patrimonio los contribuyentes cuya cuota resulte a ingresar o si el valor de los bienes y derechos supera los dos millones de euros.
¿Cuándo se presenta?
El impuesto se devenga el 31 de diciembre de cada año y la declaración se presenta en los mismos plazos de la campaña de la renta, esto es, aproximadamente de abril a junio.
¿También existe fuera de España?
Noruega y Suiza son los únicos países que mantienen un gravamen similar al español, en otros países europeos el patrimonio tributa dentro de otros impuestos como el de renta o el de inmuebles.
FUENTE: rtve.es
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