FUENTE: fotocasa.es
Realizar una reforma integral es una inversión que permite aumentar el valor del inmueble y mejorar su confort y eficiencia energética.
Teniendo en cuenta el precio del metro cuadrado en España, que en ciudades como Madrid o Barcelona se encuentra en los 5.423 euros y los 4.790 euros respectivamente, según datos del Índice Inmobiliario de Fotocasa, es habitual que muchos compradores se planteen adquirir viviendas a precios más bajos que requieran de reformas.
Esta solución, por lo general, acostumbra a ser una opción más rentable, ya que normalmente la inversión total si realizamos personalmente la reforma es inferior. Sin embargo, una reforma integral no solo aporta beneficios a nivel de ahorro, también supone otras ventajas para los propietarios de viviendas con necesidades de arreglos y actualizaciones. Las analizamos, a continuación, desde Fotocasa.
¿Cuáles son las ventajas de hacer una reforma integral en tu vivienda?
Mayor valor en el mercado, aumento de la eficiencia energética del inmueble, confort y calidad de vida para sus habitantes y diseño 100% personalizado. Repasamos los siete beneficios clave de una reforma integral:
1. Incremento del valor de la vivienda y ahorro de costes
De acuerdo con un análisis de Fotocasa basado en datos de diferentes inmobiliarias, una vivienda reformada puede aumentar su valor en hasta un 65%. Esto significa que si, por ejemplo, una vivienda antigua se adquiere por 150.000 euros, tras una reforma integral, su valor en el mercado podría ascender a los 247.500 euros.
Por otro lado, una reforma integral, que no parcial, permite ahorrar en tiempo y costes, ya que se aprovechan mejor los recursos (materiales, mano de obra…).
2. Mejora de la eficiencia energética y ahorro en las facturas
Otra de las grandes ventajas de realizar una reforma integral en una vivienda antigua es la posibilidad que ofrece de ganar en sostenibilidad y ahorro energético al instalar desde ventanas que mejoran el aislamiento hasta sistemas de calefacción o refrigeración más eficientes. Gracias a estos cambios, se optimiza el ahorro en las facturas energética a largo plazo.
3. Aumenta el confort y la calidad de vida
Al mejorar los espacios en base a nuestras preferencias (abrir la cocina al comedor para mejorar la distribución, implementar mejoras en aislamiento…), aumenta el confort y la calidad de vida en el inmueble.
Una reforma parcial siempre nos dejará la sensación de que siguen habiendo cosas por mejorar, mientras que una reforma integral permitirá relajarnos y disfrutar de la vivienda sin tener que pensar en los próximos arreglos, liberándonos a nivel mental de tener que realizar más modificaciones en muchos años.
4. Optimiza el espacio en la vivienda
Con una reforma integral es posible redistribuir los espacios de la vivienda para adaptarlos a nuestras necesidades. Además, es la oportunidad ideal de replantear cómo podemos ganar espacio en la vivienda:
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Abrir la cocina al salón comedor.
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Tirar tabiques para aprovechar espacios muertos.
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Eliminar pasillos innecesarios.
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Crear armarios empotrados.
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Cambiar la bañera por un plato de ducha y ganar espacio en el baño.
5. Diseño de interiores 100% personalizado y a tu gusto
Por muy reformadas que estén otras viviendas a la venta, es imposible encontrar una que se adapte al 100% a nuestros gustos y preferencias. Una vivienda para reformar es un lienzo en blanco, lo que nos da la oportunidad de diseñar los espacios y personalizarlos para que se adapten a nuestras necesidades y gustos: materiales, acabados, mobiliario…
6. Comodidad al reformar todas las estancias al mismo tiempo
En un proyecto de reforma en el que se abordan todos los cambios al mismo tiempo se ahorra mucho tiempo y recursos, minimizando las molestias para las familias. De lo contrario, pueden ocurrir cosas como:
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Convivir con obras cada cierto tiempo.
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Falta de cohesión en el diseño o los acabados entre una estancia y otra.
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Desgaste de los elementos ya reformados (suelos rayados, puertas con abolladuras…).
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Dificultad para encontrar los mismos materiales.
7. Reducción de las necesidades de mantenimiento y reparaciones
Finalmente, otro de los beneficios de realizar una reforma integral en una vivienda es la escasa necesidad de mantenimiento que requerirán los nuevos dispositivos e instalaciones de electricidad, fontanería, gas… Al ser nuevas, cumplen con los estándares actuales, por lo que el mantenimiento y las probabilidades de que sufran averías será menor.
Todas estas mejoras impactan en la calidad de vida de los residentes. Y, aunque la planificación de una reforma integral pueda ser estresante, a largo plazo seguro que merece la pena.
FUENTE: fotocasa.es
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